Qué es el Kéfir de leche
El kéfir de leche es una bebida probiótica que se ha hecho durante siglos y que aporta grandes beneficios para la salud. Se cree que el kéfir deriva del norte del Cáucaso, donde la leche fermentada se bebe aún hoy. A finales del siglo XIX, los científicos rusos identificaron los microorganismos vivos que le dan al kéfir de leche sus beneficios para la salud. Resulta que en los granos de kéfir de leche se encuentran millones de microorganismos como los Lactobacillus y varios tipos de levaduras que por medio de una fermentación alcohólica y láctica producen la bebida del kéfir o búlgaros.
Propiedades y beneficios del Kéfir de leche
El kéfir de leche tiene muchos beneficios y propiedades que lo convierten en una bebida saludable para incluir en tu dieta. En primer lugar, es rico en probióticos, que son microorganismos beneficiosos que ayudan a mantener la salud intestinal. Los probióticos son importantes para mantener un equilibrio saludable de la flora intestinal y pueden ayudar a aliviar problemas digestivos como el síndrome del intestino irritable y la enfermedad inflamatoria intestinal. Además, las propiedades del kéfir de leche nos aportan una buena fuente de vitaminas y minerales, tales como el calcio, fósforo y vitamina B12. El kefir de leche también contiene propiedades antioxidantes que pueden ayudar a proteger las células del daño. Se ha demostrado que el kéfir de leche estimula el sistema inmunológico y mejora el metabolismo. Hay muchas ventajas en beber kéfir regularmente.
Cómo tomar el Kéfir
El kéfir de leche se puede obtener comercialmente y la mayoría de los supermercados modernos y tiendas naturistas lo venden. Si quieres hacer tu propio kéfir de leche, necesitarás semillas de kéfir o “granos”. Estos granos gelatinosos con un tono entre marrón y amarillo, son la fuente para crear fermentos vivos que ayudan a producir kéfir naturalmente.
Hay tres tipos de bases de kéfir: el lácteo (de leche), el de coco y el de agua. Cada tipo de kéfir tiene sus propias propiedades que lo hacen ideal para diferentes propósitos. El kéfir de leche es rico en probióticos y calcio, por lo que es ideal para la salud intestinal y la densidad ósea. El kéfir de coco tiene menos azúcar y calorías que el kéfir de leche, por lo que es una opción perfecta para quienes cuidan su cintura. El kéfir de agua es rico en vitaminas y minerales, por lo que es una forma estupenda de hidratar y desintoxicar el cuerpo.
Cuál es la dosis recomendada DE KÉFIR
La cantidad de kéfir de leche que se debe consumir diariamente varía en función de la edad y el estado de salud. Sin embargo, para obtener los mayores beneficios del kéfir de leche se recomienda tomar una o dos tazas al día, ya sea tomándolo solo o mezclado con otros alimentos. Si está tomando kéfir de leche por primera vez, es posible que deba empezar con una cantidad menor y aumentarla gradualmente hasta llegar a la dosis recomendada. El kéfir de leche es generalmente bien tolerado, y beberlo regularmente puede mejorar la digestión, reducir el estreñimiento y promover una microbiota intestinal saludable. No obstante, si tienes alguna condición de salud particular u otras dudas sobre cómo y cuándo debes tomar de kéfir de leche, es mejor consultar a tu médico o nutricionista antes de incorporarlo a tu dieta.
EN QUÉ SE DIFERENCIA EL KÉFIR DEL YOGUR NATURAL
La principal similitud entre el kéfir y el yogur es que ambos son alimentos fermentados.
Por un lado, el kéfir es una bebida fermentada generalmente hecha con granos de kéfir, que son colonias de bacterias y levaduras vivas, las cuales actúan en el proceso de fermentación con los azúcares de la leche, produciendo una bebida con una consistencia similar al yogur, pero con un sabor ligeramente más ácido y efervescente.
Como hemos visto, el kéfir contiene una variedad más amplia de bacterias y levaduras que el yogur, lo cual lo convierte en una excelente fuente de probióticos.
El yogur, por otro lado, se produce principalmente mediante la fermentación bacteriana de la leche con cultivos específicos de bacterias lácticas, como Lactobacillus bulgaricus y Streptococcus thermophilus. El yogur también es rico en probióticos, pero generalmente contiene menos variedad de bacterias que el kéfir.
La diversidad en los microorganismos presentes en el proceso de fermentación, tiene como resultado diferencias en el sabor, la textura y la diversidad de probióticos presentes en cada uno.
Esperamos que hayas disfrutado leyendo acerca del kéfir de leche y sus beneficios para la salud.
¡Recuerda agregar una taza al día para obtener los mejores resultados y beneficios para la salud!